I. La iglesia esta solida y prospera depende por completo del Esp. Santo
- Una iglesia solida no es el resultado de una decisión humana o del esfuerzo humano.
- Una iglesia se edifica por el ejercicio de los dones de cada uno de los miembros.
- En la iglesia todos somos importantes y necesarios pero el indispensable es el Espíritu Santo
23Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él. 24El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió. Juan 14:23-24
· Una iglesia es solida cuando los creyentes aman a Dios y obedecen la Palabra
III. La iglesia es solida y prospera se mantiene fiel a su propósito y razón de existir
- La iglesia es llamada a vivir y testificar del Señor .
- Esta fidelidad no es siempre sencilla. Los apóstoles acá dice que fueron azotados (hechos 5:.40).
- Dios seguía manifestándose en la iglesia y el evangelio seguía extendiéndose..
Aunque la iglesia de Jesucristo sea solida, no significa que las personas que la conforman sean superhombres o súper mujeres. Sino que es precisamente en la debilidad humana donde el poder de Dios puede manifestarse. Esto es lo que nos permite mantenernos fieles a pesar de tal vez la incomprensión o el abierto rechazo de quienes nos rodean, incluso de nuestra propia familia.
· Podemos mantenernos fieles aunque las cosas no siempre ocurran como lo deseamos, aunque haya rechazo, persecución, incluso enfermedad.
· Lo solida de la iglesia no es lo humano de ella, no es una estructura o jerarquía, no es su dogma... Su indestructibilidad viene dada por aquel que es eterno.
Debemos pensar que somos el instrumento de Dios en este lugar donde estamos, de modo que todo lo que Dios haga a través de nosotros contribuirá siempre a que su Reino eterno siga manifestándose.
1 Cor 15:58 58Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.
De modo que ningún trabajo que hagamos en el Señor será en vano.